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viernes, 22 de octubre de 2010

eltiempovuela,comovuelanlospapelesolvidaos..

De pequeña, me gustaba hablar, es más estaba continuamente haciéndolo. Los niños pequeños ya de por sí hablan mucho, pues se preguntan tantísimas cosas...
Ahora también hablo, pero ya no me gusta tanto. Más que nada porque no tengo nada que decir, o mejor, "no hablo porqué no hay nadie que escuche". Solo puedo hablar de tonterías, por tanto me responden tonterías. Conclusión para escuchar tonterías no escucho, y si no escucho no me escuchan y si no me escuchan...pues no hablo.
Cosas así son las que hacen que disfrutes del silencio, o de escuchar y aprender, por ejemplo he aprendido a escuchar tonterías, aunque no lo parezca de las tonterías es de lo que más aprendo, ya que de poca gente puedo aprender algo que no lo sean.

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